Inicio >
Historias > Sin Noticias De Beagle2
2003-12-27
)
Este otro viaje del Beagle puede quedar en agua de borrajas. Es como si el primel Beagle hubiera llegado a las Galápagos y, justo ante la costa volcánica plagada de iguanas sorprendidas de ver a los marineros, y mientras Darwin (imaginen la escena con Stephen Maturin, como lo ponen en "Master & Commander") prepara sus cajas e instrumentos, el barco naufraga y nunca más se sabe nada. Pues algo así, pero con Marte. La antenita de 5 W de la sonda que ha debido caer sobre la superficie marciana lo mismo no funciona. Al menos no se ha logrado detectar en los diferentes intentos, ni desde la Mars Odyssey que trabaja estos días a modo de satélite de telecomunicaciones, ni desde el antenón Lovell de Joderll Bank. Lo van a seguir intentando y quien quiera, puede encontrar información que puntualmente rvr pone en
infoastro, o bien irse directamente a la
página de la misión.
Hay tantas posibilidades de fallo en cada cosa que uno hace, más en una misión de este tipo, que lo sorprendente es que en este mundo (o en otro, como Marte) algo llegue a funcionar. Murphy nos habla de cómo sólo una de las múltiples secuencias de hechos -muchas veces gobernados por el azar- es la correcta. Al peso, lo más probable es que algo falle. La historia humana es intentar minimizar esa tendencia de todo a ir a su aire para que vaya al que uno quiere. Pero eso exige esfuerzo, y eso se traduce en nuestros tiempos en dinero. ¿Ha fallado la programación las tareas que deberían haber hecho que la Beagle2 estuviera ya funcionando y comunicándose? Desde luego algo ha pasado.
La inercia tan humana a concatenar todo, a buscar sentido unificador incluso a lo que no lo tiene, hace que en estos momentos en que estamos sin noticias de Beagle2 especulemos por un lado sobre responsabilidades, ineficiencias o incluso inepcias de quienes tenían en sus manos hacer todo. Pero, sobre todo, ya se está elevando la explicación mítica (o pseudomítica) de la "mala suerte con Marte". Es un hecho estadístico: casi dos de cada tres misiones enviadas a Marte han fallado. ¿Y? Se comienza a insinuar alguna especie de contubernio más o menos cósmico: que si esto no puede ser casual, que si hay algo en Marte que se resiste a dejarse conocer por los humanos, que si hay montajes inconfesados...
Estos días se recordará de nuevo aquel suceso del 28 de marzo de 1989, cuando los controladores de la misión rusa perdieron el contacto con la sonda Phobos. Poco antes una imagen enviada de la luna de idéntico nombre parecía tener una mancha con un objeto misterioso que dio mucho para la especulación y la necedad por parte de los vendendores de misterios. ¿Un ovni en Marte? Pues claro, no podría ser de otro modo, únase esto al asunto de la cara y las pirámides marcianas, a otras desapariciones a las que se les dota adecuadamente de misterios y ya tenemos montado el collage adecuado.
El hecho de que Marte sea tan parecido a la Tierra (aunque ciertamente tan diferente) disparó hace poco más de un siglo la ficción casi-científica de los marcianos constructores de canales de Percival Lowell. Desde entonces, el mito de los marcianos ha sido algo demasiado poderoso para olvidarlo sin más. La propia especulación de los científicos sobre la posibilidad de vida en Marte ha venido, en tiempos modernos, a recuperar ese status del planeta rojo como algo susceptible de ser lo bastante extraño como para que estas cosas, los fallos de las misiones, sucedan.
De esta manera, fallos técnicos y humanos, impericias en las innovaciones tecnológicas, desidia en los protocolos de control de riesgos, problemas con los recortes presupuestarios, y un largo etcétera de causas "mundanas" que permiten explicar los diferentes casos de la "mala suerte", son vistos como poco más que una cortina de humo ante la "verdad" que trasciende a todo. Aunque tal cosa no exista...
(Para leer hoy:
"la maldición del planeta rojo", en El Correo. Aunque el texto no tiene nada que ver con esos contubernios y maldiciones, lo cierto es que el titular es lo que es. Y lo es porque eso, sin duda, vende...)
2003-12-27 20:49 Enlace
Referencias (TrackBacks)
URL de trackback de esta historia http://javarm.blogalia.com//trackbacks/14187
Comentarios
1
|
De: Salva |
Fecha: 2003-12-27 21:04 |
|
Desde mi modesta opinión creo que el problema es que el ser humano se ha acostumbrado a su genialidad.
Cuando una persona dice "que malo es windows", no tiene ni idea de lo difícil que es construir software. Si falla un coche igual. Incluso Boeing 747...
Y es que la ingeniería, la física y en general la genialidad del hombre ha llegado a tales extremos, que ya es difícil sorprendernos y exigimos cada vez más.
Pero como bien dice el pez, para que esto saliese bien, debían darse una cantidad tan grande de circunstancias y NO darse otra cantidad igual o mayor que, ciertamente, era muy difícil conseguirlo.
Yo es que hasta me sorprendo que hayan alcanzado la órbita de Marte, joder cuántos cálculos habrán tenido que hacer sobre recorridos, fuerzas gravitatorias, consideraciones externas, etc para llegar a la órbita de Marte. Impresionante.
Y es que la gente (la opinión pública) sigue pensando que enviar una sonda a Marte es igual que hacer una casita, arreglar una moto, pintar un cuadro o confeccionar un traje.
Y no señores, no es lo mismo.
Así que aunque no se contacte con el Beagle2 creo que no se debería de hablar de fracaso, sino de éxito menor.
Un saludo.
|
2
|
De: Pérez |
Fecha: 2003-12-28 03:16 |
|
.
Eso es que o no tiene batería o le pasa algo, como decía el padre de un amigo.
Salva tiene razón, es fácil olvidar la complejidad de las cosas. Sólo queremos resultados.
Sería una pena que la misión no tuviera un éxito completo.
.
|
3
|
De: Eratóstenes |
Fecha: 2003-12-28 04:35 |
|
La cabeza me dice que esta sonda se ha perdido. El corazón, sin embargo, me hace desear que haya tenido éxito. La misión es demasiado bonita como para renunciar a ella de repente.
A los *platillólogos* que fabrican maldiciones y otros fantasmas tan propios de su oficio, habría que recordarles que uno de los Voyager tuvo que comunicarse con el transmisor de emergencia, o que la antena principal de la Galileo no se desplegó, o que el motor iónico de la Deep Space I dejó de funcionar un tiempo...
A mi me sigue maravillando y sorprendiendo la capacidad humana para diagnosticar los fallos y vencer casi cualquier dificultad.
Por otra parte, por restricciones en el peso, la "fiambrera" Beagle-2 carece de circuitos redundantes como suele ser habitual. Si una pieza importante falla, no habrá una segunda oportunidad.
Animo. La esperanza es lo último que se pierde.
|
4
|
De: El GNUdista |
Fecha: 2003-12-28 17:19 |
|
Por lo que he leido por ahí, las posibilidades de éxito del Beagle2 eran menores del 20%, y a eso le unimos falta de redundancia en elementos críticos, en un diseño poco lógico y demasiada mecánica compleja han hecho que hagamos el ridículo.
En cuanto al comentario de Salva y Güindos, la cosa no es así, se llevaban muchísimos años haciendo sistemas operativos y ya se sabía lo que se debía hacer y lo que no se debía hacer en estos temas y va y aparece el güindos perpretando todo aquello que no se debe hacer.
Luego aparece linux, BSD y otros sistemas que siguen las reglas ya aprendidas y resultan ser muchisimo mejores sin necesidad del soporte de una inmensa multinacional, si no fuera por las prácticas mafiosas monopolistas de MS hace años que nadie se acordaría de güindos.
|
5
|
De: Salva |
Fecha: 2003-12-28 20:57 |
|
Jaja, bueno todos sabemos que tú en ese tema no eres objetivo .
Un saludo.
|
6
|
De: Carracedo |
Fecha: 2004-01-01 03:56 |
|
La ESA se quiso ahorrar el dinerito de los retrocohetes... la Beagle2 se habra despanzurrado?
|
portada | subir