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2004-07-31

Chicos Con Faldones Y Chicas Guerreras
2004-07-31

Sin duda la estrategia católica para este verano es conseguir que todo el día estemos comentando sus barbaridades. La última viene de la Congregación para la Doctrina de la Fe, a cargo del simpático Ratzinger. Han realizado una carta a los obispos sobre "la colaboración del hombre y la mujer en la iglesia" que en versión castellana pueden encontrar en este enlace. Hoy mismo el papa la ha firmado y mandado para todos (y todas). Interesante lectura, aunque sólo sea para descubrir lo que llaman "antropología bíblica", y que es desde luego la mejor humorada que uno podría encontrar... ese intento de reinterpretar el texto del Génesis para convertir la creación tan divertida de Eva a partir de una costilla del tal Adán en un encuentro de los sexos. Más o menos. Cito de la carta:

Esto se verifica a nivel ontológico, en el sentido de que la creación de la mujer por parte de Dios caracteriza a la humanidad como realidad relacional. En este encuentro emerge también la palabra que por primera vez abre la boca del hombre, en una expresión de maravilla: «Esta vez sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne» (Gn 2,23).

Y no dejen de ver cómo interpretan lo de la desnudez (juas juas juas).

Leo en ABC que el arzobispo Amato, secretario de la Inquisición (por seguir usando el nombre clásico de la susodicha Congregación doctrinal) comenta de la carta:

"la novedad reside en la respuesta a dos tendencias bien delineadas en la cultura contemporánea. La primera tendencia subraya fuertemente la condición de subordinación de la mujer, que para ser ella misma tendría que constituirse en antagonista del hombre. Se plantea, por lo tanto, una rivalidad radical entre los sexos, según la cual la identidad y el rol de uno son asumidos en desventaja del otro".

"Para evitar esta contraposición --señala el prelado vaticano-- hay una segunda corriente que tiende a cancelar las diferencias entre los dos sexos. La diferencia corporal, llamada sexo, se minimiza y se considera un simple efecto de los condicionamientos socio-culturales. Se evidencia, así, como máximo, la dimensión estrictamente cultural, llamada género. De ahí nace el cuestionamiento de la índole natural de la familia, compuesta por padre y madre, la equiparación de la homosexualidad a la heterosexualidad, la propuesta de una sexualidad polimorfa".

"Según esta perspectiva antropológica --dice el arzobispo Amato-- la naturaleza humana no lleva en sí misma características que se impondrían de manera absoluta: toda persona podría o debería configurarse según sus propios deseos, ya que sería libre de toda predeterminación biológica. Frente a estas concepciones erróneas la Iglesia reafirma algunos aspectos esenciales de la antropología cristiana fundados en los datos revelados en la Sagrada Escritura".


En fin, que creando una "línea de enmedio" en el que la cosa femenina es fundamental, pero con esa dimensión generadora y familiar, la Iglesia intenta nadar en sus turbulentas aguas: cada vez más está cuestionada la misoginia católica, la participación de las católicas en las labores de su iglesia y todos esos temas. Para acallar las voces disidentes, arremeten contra la no discriminación de las mujeres. Estupendo, eso sí que es estupendo. Porque al fin y al cabo, que ellos (los obispetes) quieran justificarse ellos mismos y explicar que si no incluyen en su club a las chicas es porque no les da la gana y porque tienen buenas razones de "antropología bíblica", lo que se ponen a afirmar acaba implicando a todos. Una vez más, pretenden establecer criterios generales para la sociedad pasando por encima de los derechos humanos. Esta vez son los derechos de las mujeres.

Leo en Europa Press:

se denuncia "la tendencia a subrayar fuertemente la condición de subordinación de la mujer con el objetivo de suscitar una actitud de rebeldía".

Según él, la consecuencia es que la mujer "para ser ella misma, se erige en rival del hombre. Al abuso de poder, responde mediante una estrategia de investigación del poder, y este proceso lleva a una rivalidad entre los sexos".

"Una segunda tendencia que parece consecuencia de la primera: para evitar cualquier supremacía de uno u otro sexo, se tiende a difuminar sus diferencias, consideradas simples efectos de un condicionamiento histórico y cultural", añadió.

"La ocultación de la diferencia o de la dualidad de los sexos tiene consecuencias enormes a distintos niveles y ha inspirado ideologías que promueven que se cuestione la familia, por naturaleza biparental, lo que quiere decir compuesta por un padre y una madre, así como la equiparación de la homosexualidad y la heterosexualidad", precisó.

Así que nada de que las chicas sean guerreras. Que no, que el plan divino para ellas no pasa por que quieran parecerse a los tíos. Nones. ¿Hasta dónde ha de llegar esa discriminación? Pues la Iglesia, a pesar de las treinta y tantas páginas de la carta, no logra establecerlo adecuadamente. Quiero decir: sería más sencillo que emplearan el castellano viejo y dijeran: "la mujer en casa y con la pata quebrada". Como esto les da un poco de cosa (bueno, igual a Monse Gea no, pero a los de la Inquisición sí), pues le dan vueltas y vueltas y más vueltas para, sin decirlo, dejarla en casa y con la pata quebrada. La responsabilidad tan altísima (tienen que acudir a la Virgen María, qué remedio) de la maternidad y la familia les exige otras dedicaciones. Que no, que no se metan de curas, mejor que barran la sacristía.

Pues eso: lo gracioso es que todo esto viene de una lucha que se está dando en círculos teológicos estadounidenses. Parece que allí en los EEUU han asumido desde hace tiempo que hay que cambiar las cosas: que ya era demasiado tener más de un 40% de homosexuales de curas, que ya era demasiado tapar y pagar todos los escándalos pederastas, que la gente les mira con rechifla y no hay ya serie de tv donde no hagan risas de esas cosillas de los católicos. Pero cada vez que intentan renovar, llega Ratzinger y su inquisición y les dice que nones. Es entretenido todo esto. Salvo porque, como ya comentaba, luego pretenden que su "sostenella y no enmendalla" tenga alcance de criterio moral para todo el mundo.

Y eso sí que no. Las mujeres tienen el mismo derecho de cualquier otro ciudadano, faltaría menos. La cuestión de la prole y la familia no es cosa sólo de las mujeres, sino de las familias que procrean o adoptan. Que mal que les pese a los dueños de este club carcunda y trasnochado, la sociedad no tiene por qué ser carcunda y trasnochada. Y si a sus eminencias les sigue gustando vestirse con faldones, no tienen por qué sorprenderse de que las chicas quieran ser guerreras.

Y que lo sean. Y mucho. Ya han comenzado a contestar las necedades de la Inqusición. Leo en la SER:

Los colectivos feministas han reiterado su petición de revisar las relaciones Iglesia-Estado, ante esta nueva posición “inconsentible”. Ángeles Álvarez, presidenta de la Red Feminista contra la Violencia de Género, la carta es “un manual de auténtico machismo radical, un ataque a los principios básicos de igualdad. Es un documento preocupante porque ataca a principios de Naciones Unidas relavitos al reconocimiento de derechos de la mujer en el mundo”.

Por su parte, la coordinadora del Foro Mundial de Mujeres, Marta Mas, considera “aberrante” el documento. “Cada vez que hacen una declaración en contra de los derechos de la mujer, lo hacen contra los derechos de los seres humanos”. Mas considera que los grupos feministas y las mujeres no piden “nada que no nos corresponda”.

Pues eso. Por cierto, ¿no deberían comenzar los católicos a pedir la jubilación de su jerarquía? ¿No será que chochean un poco?

2004-07-31 01:00 Enlace

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Comentarios

1

De: luis Fecha: 2006-10-20 00:49

pienso que deberian estudian un poco mas de antropologia, antes si quiere de meterse en un campo como el de la entropologia cristiana, analizar la posicion de la mujer desde la prespectia de la iglesia a simle vista desde lo derechos humanos meramente...es ser simplista y poco racionalizada, creo que esta visiada por un sentimiento de antimachismo y antieclisismo intenso... falta ,as razon para hacer una critica valida

2

De: Yabba Fecha: 2006-10-20 09:41

"analizar la posicion de la mujer desde la prespectia de la iglesia a simle vista desde lo derechos humanos meramente...es ser simplista y poco racionalizada" Tiene cojones la cuestión. Al parecer si un obispo mantiene que la mujer debe estar subordinada al hombre porque lo dice la Biblia es porque tiene una posición racionalizada, y si los demás decimos que es una declaración escandalosamente machista es porque somos simplistas y poco racionales. ¿En qué coño afecta la antropología a la igualdad entre sexos, luis? ¿Tienes algún estudio antropológico que contradiga eso que hoy es un principio básico de nuestra legislación o de nuestro concepto de los derechos humanos? ¿O simplemente es la tontada que se dice por decir sin tener con qué respaldarla, para dar un argumento "místico" con el que apoyar a la Iglesia en cualquier estupidez en la que pretenda embarcar a la sociedad? Son cojonudos : sueltan sus gilipolleces al aire así por las buenas y si les criticas, es porque no sabes suficiente de SU rollo. Por cierto, y al mismo nivel de crítica que tú, antes de escribir conviene un cursillito de ortografía y gramática. Más que nada para entenderte más fácil, tengo al egiptólogo de vacaciones.

3	De: Suminona Fecha: 2006-10-20 14:51
"entropologia cristiana" Joder, entropología cristiana, eso debe ser el estudio de la entropía a nivel del cristianismo, el alma y las pollas en vinagre. Voy a buscar bibliografía científica en Internet...

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