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la boca
artículos, escritos y demás piezas perfectamente obviables perpetradas por Javier Armentia (@javierarmentia por algunas redes)

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2002-12-29
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Lecturas recientes
2002-12-29


Hay épocas en las que uno logra desengancharse un poco de esto de la Linterna Mágica, digo, el Internet. Más o menos, quiero decir. Estos días ha sido aprovechando alguna ausencia, algún reencuentro, digestiones excesivas, estas historias que a todos nos suceden. Así que he tenido tiempo de retomar la lectura de algunos libros. (En efecto, mi biblioteca también se compone mayoritariamente de libros "pendientes de leer" que, como todo comprador compulsivo de libros, un día traje a casa para empezarlo en ese mismo momento y no hubo manera).

Así que, a modo de breve inventario, coloco aquí algunos de los que han ido cayendo. Porque, lo confieso, además me han encantado. Cada uno de ellos me ha dejado queriendo volver hacia atrás y evitar el momento en el que había llegado al final.

Por ejemplo, el de Apostolos DIoxadis: "El tío Petros y la conjetura de Goldbach". Lo compré hace un montón de tiempo, en una edición de esas de bolsillo, tirado de precio (Punto de Lectura, 208), atraído por el título, evidentemente, como le habrá pasado a casi todo el mundo, que te suena la cosa de la conjetura maemática irresoluta y, claro, verla de repente en un título es algo que no puedes obviar. Lo cierto es que la novela me ha tenido oscilando entre la decepción y la pasión enamorada. Quizá sea la forma de escribir de este hombre, o la manera en que deja cosas colgando por todos los sitios. Pero uno se va metiendo en la historia de Petros y cae preso en ese hilo tan bien tejido del amor por los números.

Luego, para compensar, he caído en otras redes, a mi gusto mejor escritas, más vivas, que son las de Luis Goytisolo, en "Escaleha hacia el cielo" (Espasa Narrativa). También llevaba más de un año por las estanterías reclamando un momento. Pero Goytisolo (todos los hermanos) requieren un momento siempre muy especial. Y Luis ha conseguido una vez más que su texto sea devorado. Al final, necesito más, siempre más, mucho más sobre ese conjunto de personajes tan comunes cuyas pasiones, expectativas o desilusiones constituyen esta novela, la reflexión sobre unos tiempos en los que la gente, realmente, es así.

Vamos, que estaba entonces la mar de melancólico, reflexivo sobre la sociedad actual, sus valores, y he tenido que meterme en la pesadilla de un texto de Torrente, "Doménica" (también en Espasa Narrativa), un texto póstumo de Gonzalo TB incómodo, más aún pensando que está escrito para niños -para hacerles sufrir, posiblemente- trastocando lo elementos clásicos de un cuento: reyes, princesas, brujas, ogros, batallas, magia... en algo que es o deja de ser por la voluntad de una niña que no sabes si es la más vieja del mundo. No he entendido, de todas formas, casi nada. O creo que no, tendré que dejarlo reposar a la luz tenue de una noche de estas, con una buena copa, pensando en nada.

Entretanto, a ratos, la paso leyendo los cuentos de "Primavera de luto", de Juan José Millás (sigo enamorado de este hombre inefable) El libro, también en Punto de Lectura (no. 13), es una colección de cuentos del 89. Pero da igual que no sea la última, porque sigue siendo eterna.


Ya de pequeña, en los primeros años de mi infancia, comprendí que el ser humano está más dotado para la infelicidad que para la dicha. Por eso me llamaba la atención ver cómo hombres y mujeres, desde edades muy tempranas, se afanaban por labrarse un futuro feliz. Naturalmente, cuando llegaba el futuro -vacío de placer, pero rico en desventura- caían en profundas depresiones, pues habiéndose preparado par afrontar la dicha, ignoraban de qué manera se debe manejar el infortunio.
Juan José Millás, "Ella era desdichada"

2002-12-29 14:44 Enlace

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Comentarios

1
De: tu ciberamigainvisible Fecha: 2002-12-29 16:39

hombre, ya está bien... una se mata para hacer un ciberegalito y nada, que no vienes a buscarlo!
snif...
seguiré poniendo pistas!



2
De: El Pez Fecha: 2002-12-29 17:37

Sielos!

yo leyendo tontamente y había olvidado por completo lo del ciberamigo ciberinvisible... lo mismo tengo a alguien ya loco buscando un regalito que AYYYYYYY aún ni he pensado...

Pongo una primera pista, para ir haciendo boca, antes de irme a ver si encuentro a mi ciberamiga :-)

Y me voy cantando:
sing along for yesterday
sing along we'll sore today
sing along another song for you
whats a boy to do?



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