artículos, escritos y demás piezas perfectamente obviables perpetradas por Javier Armentia (@javierarmentia por algunas redes)
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2007-10-05
Por La Gimnasia Hacia Dios
Ese debe ser el lema de la Escuela de Magisterio "La Inmaculada" que, sorpresas de este país -es decir, nada sorprendente- está adscrita a la Universidad de Granada y expide títulos para gente que luego se dedica a insertar en el sistema educativo a los niños de las futuras generaciones. Por la gimnasia hacia Dios, y en la gimnasia, en la clase de educación física, hay que evangelizar a los alumnos. Al menos eso cuentan en una noticia que le leo a Ramón Ordiales en la lista escépticos publicada en El País.
La historia: Josué González era profesor de educación física en la tal Inmaculada-del-Magisterio-Inc. Y como no sentía la llamada de Cristo, por lo que se ve, porque su "compromiso cristiano no era el adecuado", le despidieron. No por dar mala educación física, ni por enseñar mal la didáctica de la misma ni tales carneros. Por estar sordo en su vida a la insistente llamada de Dios, cosa que los administradores de esa escuela de magisterio deben poder detectar fácilmente. (¿Recuerdan aquel famoso God Meter? Pues algo así tendrán para pillar a los impíos o incluso a los tibios...)
La noticia cuenta que ya en 2004 el centro fue condenado por dos despidos improcedentes. Cuenta también del "miedo y la falta de libertad" que sienten los docentes... Son cosas de las tesis reaccionarias (que casi es sinónimo de católicas en la sociedad actual, aunque haya sus matices) del arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez. Aquél que fue acusado de acoso moral y coacciones por un sacerdote, que dio el palo en la Escuela de Teología, cerrando las filas, y reivindicando "las doctrinas de san Efrén, san Benito, san Agustín y santo Tomas de Aquino", el mismo ante quien protestaron muchos colectivos de base por su política. El que cerró la iglesia de Albuñol porque se quedaron sin cura, al largar al peligrosísimo (por lo que se ve) "cura de los senegaleses", que no es cosa de que la iglesia se ponga a reivindicar las condiciones de vida de unos negros inmigrantes ilegales, que lo que hay que hacer es oficiar bodas de los católicos de pata negra y esas cosas que dan más limosnas... Ese arzobispado que fleta autobuses y autobuses cada vez que hay que ir de manifestación a Madrid, ese Gran Hombre.
Total, que ahora nos enteramos de que hace falta carisma para enseñar la educación física. Ya lo tenía claro el nacionalcatolicismo, que permeaba en todas las asignaturas, y especialmente en las de educación física, donde solían caer como profesores exdeportistas cercanos a la falange y las milicias cristianas... O curas, que también sufrí un caso de esos. Un curita montando partidos de fútbol para mayor gloria de Dios: cuando vi algo así en la película de Almodovar "La mala educación", me acordé de mi tierna infancia.
Así que ahí le han dado. Al Sr. González, que ha visto rescindido su contrato. A ver qué sucede en la magistratura de trabajo. Mientras tanto, disfrutemos: los estudiantes de la escuela de magisterio católica esa de Granada serán verdaderos transmisores, desde la clase de educación física a la de matemáticas, de las iluminaciones que nuestro (un decir, más bien "su") Señor pensó y diseño en el mismo momento de la creación del Universo.
Me voy a hacer unas flexiones por la próxima canonización del Wojtyla.
2007-10-05
)
Por La Gimnasia Hacia Dios
2007-10-05
Ese debe ser el lema de la Escuela de Magisterio "La Inmaculada" que, sorpresas de este país -es decir, nada sorprendente- está adscrita a la Universidad de Granada y expide títulos para gente que luego se dedica a insertar en el sistema educativo a los niños de las futuras generaciones. Por la gimnasia hacia Dios, y en la gimnasia, en la clase de educación física, hay que evangelizar a los alumnos. Al menos eso cuentan en una noticia que le leo a Ramón Ordiales en la lista escépticos publicada en El País.La historia: Josué González era profesor de educación física en la tal Inmaculada-del-Magisterio-Inc. Y como no sentía la llamada de Cristo, por lo que se ve, porque su "compromiso cristiano no era el adecuado", le despidieron. No por dar mala educación física, ni por enseñar mal la didáctica de la misma ni tales carneros. Por estar sordo en su vida a la insistente llamada de Dios, cosa que los administradores de esa escuela de magisterio deben poder detectar fácilmente. (¿Recuerdan aquel famoso God Meter? Pues algo así tendrán para pillar a los impíos o incluso a los tibios...)
La noticia cuenta que ya en 2004 el centro fue condenado por dos despidos improcedentes. Cuenta también del "miedo y la falta de libertad" que sienten los docentes... Son cosas de las tesis reaccionarias (que casi es sinónimo de católicas en la sociedad actual, aunque haya sus matices) del arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez. Aquél que fue acusado de acoso moral y coacciones por un sacerdote, que dio el palo en la Escuela de Teología, cerrando las filas, y reivindicando "las doctrinas de san Efrén, san Benito, san Agustín y santo Tomas de Aquino", el mismo ante quien protestaron muchos colectivos de base por su política. El que cerró la iglesia de Albuñol porque se quedaron sin cura, al largar al peligrosísimo (por lo que se ve) "cura de los senegaleses", que no es cosa de que la iglesia se ponga a reivindicar las condiciones de vida de unos negros inmigrantes ilegales, que lo que hay que hacer es oficiar bodas de los católicos de pata negra y esas cosas que dan más limosnas... Ese arzobispado que fleta autobuses y autobuses cada vez que hay que ir de manifestación a Madrid, ese Gran Hombre.
Total, que ahora nos enteramos de que hace falta carisma para enseñar la educación física. Ya lo tenía claro el nacionalcatolicismo, que permeaba en todas las asignaturas, y especialmente en las de educación física, donde solían caer como profesores exdeportistas cercanos a la falange y las milicias cristianas... O curas, que también sufrí un caso de esos. Un curita montando partidos de fútbol para mayor gloria de Dios: cuando vi algo así en la película de Almodovar "La mala educación", me acordé de mi tierna infancia.
Así que ahí le han dado. Al Sr. González, que ha visto rescindido su contrato. A ver qué sucede en la magistratura de trabajo. Mientras tanto, disfrutemos: los estudiantes de la escuela de magisterio católica esa de Granada serán verdaderos transmisores, desde la clase de educación física a la de matemáticas, de las iluminaciones que nuestro (un decir, más bien "su") Señor pensó y diseño en el mismo momento de la creación del Universo.
Me voy a hacer unas flexiones por la próxima canonización del Wojtyla.
2007-10-05 16:24 Enlace
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