supongo, pez, que la verdad, como la justicia, son más abstractas que kandinski. Y como en sus cuadros cada uno las encuentra dónde quiere encontrarlas, o ve lo que quiere ver.
En cualquier caso tú estás ayudando a la tuya, a tu verdad y a la de muchos que pensamos como tú, y eso no puede estar mal. Al menos te planteas su búsqueda, y rastreas, y eso es ya es mucho más de lo que hacen algunos. Gracias en nombre de los que como tú andamos dando tumbos.

La verdad... eso, ¿dónde está? La ética y la moral son así... no encontraremos - lamentablemente - respuestas en ninguna probeta, bajo ningún microscopio. Ninguna foto nos afectará tanto como la realidad, que jamás llegamos a vivir, de una guerra.

Cuando nos molesta, podemos cerrar la ventanita del Navegador, o apagar el televisor. Sin medios de comunicación ni siquiera hubiesemos sabido que en Irak están llevando a cabo una guerra.

Lo importante a la hora de buscar la verdad, es seguir buscándola. Ánimo ElPez.

Sacado de un interesantísimo artículo de Eduardo P. Kragelund , editor del servicio español de Reuters, titulado "La Guerra de las Palabras" sobre el uso del lenguaje en la guerra:
«Las informaciones que se obtienen durante la guerra son en gran parte contradictorias, en la mayor parte falsas y casi todas inciertas».
(De la Guerra, Karl Von Clausewitz)
El autor del artículo concluye que "la única arma efectiva contra la desinformación y la propaganda es la desconfianza y el conocimiento. Si nunca dejamos de preguntarnos «por qué» y si sabemos el «porqué» del conflicto, seguramente vamos a estar en condiciones de escribir una buena nota, con información veraz, sin publicidad, en la que al pan lo llamaremos pan y al vino, vino."

Gracias por los raudos comentarios... En efecto, posiblemente debemos seguir haciéndonos preguntas. Y, en este mundo donde todos nos movemos por intereses, la de qui prodest es de las que más nos aclaran el horizonte. ¿A quién beneficia?

¿Dije QUI? Era, obviamente QUID! (deberé escribir miles de veces en un muro de lamentaciones Romanes eunt domus, esto... Romani ite domum...

Me temo que esta vergüenza no va a parar, hagamos lo que hagamos. Así que lo más importante será no olvidarlo nunca, ni esto, ni aquello. La mejor forma de no olvidar las cosas es repetirlas muy a menudo, así que, por favor, no dejes nunca de seguir diciendo, en libertad, lo que te parezca.

Yo, la verdad, ya estoy un poco harto de que algunos individuos establezcan peligrosas advertencias, del tipo o estás conmigo o estás contra mi. En ocasiones como esta, hasta es posible estar contra las dos partes en conflicto.

No dejar de escuchar.
No dejar de pensar.
No perder la esperanza.
No callar.

...No a la guerra, Nunca máis... hay que ver lo positivos que se vuelven algunos adverbios cuando van bien acompañados.

La liberta, la verdad, la justicia, la paz, son quimeras.
La opresión, el engaño, la injusticia, la guerra, son verdades rotundas.
La paz, es morirse un día.

Bueno, El Último... uno desearía ir acercándose a las quimeras cada día, antes de descansar "en paz". Creo que es factible, al menos la lucha por ello es una lucha necesaria. Imprescindible.