No sé si los médium son unos estafadores por cobrar dinero; ellos, con sus intervenciones intentan demostrar que hay vida más allá de la muerte; si, cobran por ello, como “Por la boca muere pez” tiene también tiene sus ganancias por intentar demostrar lo contrario. Vosotros satisfacéis a vuestros oyentes, oyendo lo que quieren oír, y los videntes igualmente; tanto vosotros como ello no demostráis nada, para lo que os crean a vosotros sí, claro, igual que los que crean a ellos. Resumiendo, todos sacáis tajada del tema

Perdona, Carlos: esta colaboración en Radio Euskadi, como muchas otras que hago en otros sitios, es gratis et amore. Pero aunque fuera pagada, no es lo mismo cobrar por la realización de un trabajo que lucrarse de la credulidad ajena. No todo el trabajo es estafa, parece triste que haya que explicar algo tan sencillo.

Perdona por pensar que cobrabas, creía que así era, creía, pero como me fio de tu palabra… Tú lo has dicho: “no todo el trabajo es estafa” yo no he dicho lo contario, pero si quieres seguir perdiendo el tiempo explicando algo tan sencillo, adelante.
No se puede generalizar, hay videntes que no cobran, por ello deberías matizar tus comentarios.

¿Que no cobren convierte por arte de magia a un engña credulos como la videncia en algo real?.

Claro, claro.

¿Y quién juzga que una vivencia es real o ficticia? ¿o acaso algunos de los que juzgan no pueden ser también imaginarios?
En este tipo de temas unos casos son tan de pacotilla que hasta un niño de cinco años los ve, pero otros son tan complejos que hasta la ciencia más ciencia los resuelve como si la de pacotilla fuera ella. Yo es que hasta dudo que mi existencia sea real o ficticia.